La informática debe concebirse en un sentido amplio y con un carácter propio.
Si bien no existe una definición precisa del alcance de esta disciplina, es
importante señalar que la misma ha surgido como una convergencia durante varias
décadas entre las telecomunicaciones, las ciencias de la computación y la
microelectrónica, incorporando a su vez conceptos y técnicas de la ingeniería,
la administración, la psicología y la filosofía, entre otras disciplinas.
Algunas áreas de la informática como es la de la inteligencia artificial tienen
una estrecha relación con los algoritmos de búsqueda y de optimización de la
investigación de operaciones y con los conceptos de psicología cognitiva.
Por otro lado, es importante notar que la informática tiende a trivializarse
como resultado de la accesibilidad al uso de las tecnologías de información.
Esta trivialización se manifiesta con actitudes simplistas que buscan reducir el
alcance de la educación en informática a cursos de capacitación sobre el uso de
las tecnologías, o a actitudes derrotistas que descartan cualquier posibilidad
de que nuestro país participe en el proceso global de investigación e innovación
en este tipo de tecnologías